Alicante, 12-12-2025.

A partir de enero, los bancos enviarán los saldos y movimientos de forma mensual

A partir de 2026, la Agencia Tributaria recibirá datos de las cuentas de los autónomos de forma mensual. Los técnicos de Hacienda prevén un aumento de los embargos y mayor control a los pequeños negocios.

A partir de de enero de 2026, la Agencia Tribitaria (AEAT) empezará a recibir información mensual de las cuentas de todos los autónomos. Bancos, entidades de pago y proveedores de servicios como Bizum estarán obligados a remitir cada 30 días los movimientos registrados, así como las operaciones con tarjetas y medios de cobro habituales.

Esta novedad forma parte del decreto aprobado en abril de 2024, que elimina el actual umbral de 3.000 euros para informar a Hacienda y obliga a comunicar todos los cargos, abonos y saldos relevantes sin límite mínimo de importe. Hacienda dispondrá así de información que antes llegaba solo una vez al año y que ahora se actualizará casi en tiempo real.

Aunque los cambios no suponen nuevas obligaciones formales para los trabajadores por cuenta propia, sí modificarán la velocidad con la que Hacienda podrá detectar y actuar ante posibles irregularidades. Esto ha generado inquietud entre muchos profesionales ante la sensación de un mayor nivel de vigilancia.

¿Qué vigilará Hacienda en las cuentas de los autónomos a partir de enero?

Según explicó a este medio José María Mollinedo, secretario general del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), el objetivo principal del control mensual es evitar que los grandes fraudes se consoliden y crezcan “como una bola de nieve” antes de que la agencia pueda reaccionar.

En este sentido, Mollinedo recordó que la Agencia Tributaria ya ha sufrido situaciones en las que la información llegaba demasiado tarde y el fraude se disparaba durante meses. Un ejemplo fue el de algunas empresas dedicadas a la venta de hidrocarburos que, hasta la reforma de 2024, podían comercializar gasolina y gasóleo sin ingresar el impuesto especial correspondiente. 

Aunque la Agencia Tributaria ya tenía los saldos y movimientos de los autónomos a lo largo del año, esta nueva información mensual hará que Haciendaacceda “en un periodo más corto” a sus datos.

Facturas falsas y declaraciones trimestrales no presentadas

Además de los grandes fraudes, la información mensual permitirá identificar con mayor rapidez a pequeñas empresas o autónomos implicados en prácticas de facturación irregular. 

Según explicó Mollinedo, será más fácil detectar a quienes reciben facturas pero no presentan las declaraciones trimestrales de IVA, algo que hasta ahora podía tardar meses en aflorar.

En estos casos, la Agencia podrá actuar “rápidamente” enviando requerimientos para que se presenten las autoliquidaciones omitidas e ingresen las cantidades pendientes.

El secretario general de Gestha también mencionó que esta mayor inmediatez afecta a los emisores de facturas falsas, una práctica habitual en sociedades sin patrimonio y con administradores interpuestos.

“Cuando mandamos estos requerimientos, no viene nadie o aparece un asesor fiscal contratado solo para esa acción”, explicó. Con el nuevo control, este tipo de perfiles será más fácil de identificar desde el inicio.

Actividades no declaradas cobradas por Bizum o transferencia serán más visibles

Otra de las consecuencias prácticas del control mensual es que determinados ingresos que antes pasaban desapercibidos ahora serán más fáciles de detectar si no se ocultan en efectivo. 

Mollinedo matizó que una “venta en B” cobrada con tarjeta o transferencia “no significa automáticamente que se vaya a abrir una comprobación”, pero sí reconoció que es más probable que eso ocurra si se observan patrones de ingresos que no se corresponden con la actividad declarada.

El aumento del control sobre Bizum también puede afectar a quienes realizan trabajos esporádicos o actividades profesionales sin darse de alta.

Un ingreso aislado no genera alarma, pero cobros recurrentes, especialmente de importes similares o en fechas regulares, pueden perfilarse como una actividad económica encubierta. 

El portavoz de Gestha puso como ejemplo a músicos callejeros o profesores particulares: mientras los donativos aislados son difíciles de calificar, los ingresos periódicos “empiezan a dibujar la frontera” entre un gesto voluntario y un servicio profesional.

Los ingresos recurrentes pueden hacer saltar las alarmas

Aunque la información sea más frecuente, Mollinedo quiso dejar claro que la AEAT no abrirá comprobaciones por cada descuadre menor. 

Según explicó, Hacienda debe elegir los incumplimientos “más abultados” y no perseguirá la economía sumergida doméstica –como pequeños trabajos o favores entre particulares–, que no constituyen una prioridad.

El técnico de Hacienda recordó que, en muchos casos, estas actividades no generan impuesto sobre la renta si el volumen no supera ciertos umbrales, pero sí pueden generar obligaciones de IVA dependiendo del tipo de servicio.

Sin embargo, sí habrá menos margen para actividades profesionales encubiertas cuando los ingresos queden registrados en la cuenta bancaria del autónomo. 

En el caso de que los cobros son periódicos y respondan claramente a una prestación de servicios, estos ingresos “retratan” al contribuyente y permiten identificar que se trata de una actividad empresarial o profesional real, sujeta a IVA y a tributación en el IRPF.

Esto incluye tanto cursos, clases, trabajos puntuales remunerados como prestaciones que, aun siendo informales, generan ingresos repetidos y trazables. El control mensual no multiplica las inspecciones, pero sí hace más visible aquello que antes quedaba diluido en la información anual.

La información mensual facilitará los embargos de las cuentas de los autónomos

Otro factor a tener en cuenta es que gracias a la información actualizada mensualmente, Hacienda podrá realizar embargos con mayor rapidez y precisión. 

Hasta ahora, al recibir los datos de las cuentas solo una vez al año, la AEAT podía encontrarse con saldos que ya no existían o con movimientos demasiado antiguos para actuar con eficacia, según los técnicos de Hacienda.

Pero con la información mensual, Mollinedo explicó que “las actuaciones de embargo de cuentas bancarias pueden ir a tiro hecho ya sobre los saldos del último mes y no del último año”.

Esto no implica un aumento de embargos para quienes cumplen, argumentó, pero sí refuerza la capacidad operativa de Hacienda cuando debe actuar frente a deudas o procedimientos abiertos. En estos casos, el tiempo de reacción de la Administración se acorta y la información se vuelve útil “en caliente”.

El plan de control sigue afectando más a los autónomos que a las grandes compañías

Pese a los avances tecnológicos, los técnicos de Hacienda reconocen que el sistema de selección de contribuyentes seguirá generando un desequilibrio: los pequeños serán investigados con más frecuencia que los grandes. 

La razón es estructural ya que la Agencia Tributaria selecciona a quién investiga mediante el llamado “control de la discrepancia”, que el secretario general de Gestha definió como “la diferencia que existe entre la información de las bases de datos y la información que figura en las declaraciones tributarias del contribuyente”.

Mollinedo aclaró que, habitualmente, “quien incurre o quien puede incurrir en una discrepancia” es en realidad “un perfil de contribuyente de pequeña cuantía”. Entre otras razones, porque “no tiene asesor o tiene una asesoría poco especializada”.

Por el contrario, las grandes compañías suelen evitar cualquier señal que active una comprobación de forma que “salen del primer vistazo del censo de los posibles contribuyentes que van a ser investigados”. Tal y como explicó el portavoz de Gestha, una empresa de gran tamaño “cuenta con asesores expertos, gabinetes contables, directores financieros y difícilmente van a incurrir en una discrepancia”.. 

Fuente; autonomosyemprendedor.es