Alicante, 14-07-2022.
- El margen se reduciría hasta el 5,1%, el más bajo de la última década
- El porcentaje de consumidores sensibles al precio se sitúa en el 40%
La inflación y la alta sensibilidad de los consumidores hacia el factor precio harán que el margen del beneficio del pequeño comercio alcance este año su nivel más bajo de la última década, con una reducción estimada del 52% que lo situaría en el 5,1%, según un informe de la empresa de servicios profesionales Álvarez & Marsal (A&M) realizado en colaboración con Retail Economics.
El estudio revela que, con el nivel de inflación más alto de los últimos 40 años y excluyendo el impacto de la pandemia, la economía española se encuentra a la cabeza de los países europeos con mayores dificultades y donde la proporción de consumidores preocupados por los precios es mayor, alcanzado al 40%.
En este sentido, el informe indica que hasta un tercio de los consumidores españoles estaría dispuesto a sacrificar la sostenibilidad y la calidad de los productos que compra a cambio de pagar un precio más bajo.
A pesar de esta mayor sensibilidad hacia el precio, según el informe de A&M, también indica que la pandemia ha hecho crecer la concienciación en materia de sostenibilidad, ya que más del 35% de los consumidores españoles estaría dispuesto a pagar un poco más, y un 6% bastante más, en función de esta variable. Sin embargo, España se encuentra aún muy por debajo de los países con una mayor sensibilidad en materia de sostenibilidad como Suiza, donde el porcentaje roza el 63%.
Materias sensibles
Entre las cuestiones de sostenibilidad que más preocupan a los consumidores el informe señala las condiciones salariales de los trabajadores, los materiales de producción y los compromisos de reducción de la huella de carbono de las empresas.
Según indica Alejandro González, director de A&M en España, “Aunque el precio está siendo un factor cada vez más importante para los españoles a la hora de tomar decisiones de compra, la demanda de los consumidores de que los comercios actúen de forma ética y sostenible sigue creciendo. Cabe destacar que en contexto inflacionario como en el que nos encontramos, los comerciantes deberían acercar sus productos a las necesidades de los consumidores, pero sin olvidar que la sostenibilidad también puede crear oportunidades comerciales”.
En el caso del pequeño comercio, la responsable de Retail y Consumo de A&M en Europa, Erin Brookes, indica que, “a medida que aumentan los costes y se intensifica la competencia, las empresas orientadas al consumidor tienen que transformarse para evitar una crisis de beneficios. Será fundamental invertir en digitalización para impulsar la eficiencia y la agilidad de los procesos. En estos contextos de incertidumbre, las cadenas de suministro también deben adaptarse para ser más flexibles, diversificando y simplificando su operativa. Sin estos cambios, los márgenes y la rentabilidad seguirán sufriendo un duro golpe”.
Fuente; eleconomista.es