Cuánto tiene que pagar un autónomo de IRPF

Alicante, 4-10-2023.

El IRPF (Impuesto de la Renta de las Personas Físicas) es el impuesto que tienen que pagar los autónomos por el beneficio que obtengan de su actividad empresarial.

El IRPF se paga, una vez al año, a través de la declaración de la Renta, si bien el autónomo tiene la obligación, durante el año fiscal de hacer pagos a cuenta y retenciones, para adelantar dinero a cuenta de ese impuesto.

Los tramos de IRPF que afectan al autónomo

Los autónomos pagan en función de lo que ganan, es decir el IRPF es un impuesto progresivo sobre los rendimientos que obtienen.

Para esto, Hacienda establece todos los años, en los presupuestos generales del Estado, unos tramos, que para este año 2023 son los siguientes:

El tipo efectivo de IRPF

El uso de estos tramos del IRPF tiene la particularidad de que no se aplica al total sino también por teniendo en cuenta esos ingresos por tramos, por lo que para saber qué porcentaje real que se paga de impuestos, habrá que calcular el tipo efectivo del IRPF, que será porcentaje de impuesto que se ha pagado en relación con los ingresos obtenidos.

Veámoslo con un ejemplo. Supongamos que un autónomo gana al año 35.000 euros.

• De estos 35.000 euros, 12.450 euros estarían en el primer tramo. En este tramo se aplica un IRPF del 19%, resultando a pagar 2.365,50 euros (12.450 x 19%).
• Los siguientes 7.749 euros se encuadran en el segundo tramo. En este caso se aplica un porcentaje de IRPF del 24%, resultando 1.859,76 euros (7.749 x 24%).
• Y hasta llegar a los 35.000 euros, faltan 14.801 euros (35.000 – 12.450 – 7.749) a los que se aplica el tercer tramo. En este caso, el IRPF del tramo es del 30% lo que significa 4.440,03 euros.

El importe total de IRPF a pagar será de 8.665,50 euros, lo que significa un tipo efectivo de IRPF del 24,76 % (8.665,56 / 35.000).

Cómo paga el IRPF el autónomo

Ya está claro que el autónomo tiene que pagar el IRPF, pero, ¿Cómo lo tiene que hacer?

En realidad, la gestión del IRPF durante el año fiscal se realiza mediante dos formas, durante el ejercicio fiscal con los pagos a cuenta que realiza el autónomo a través de las retenciones en las facturas y los pagos trimestrales del impuesto, y en los meses de abril y junio del año siguiente, con la declaración de la renta, donde se realiza la liquidación final del IRPF descontando los pagos a cuenta realizados.

Estas obligaciones son las siguientes:

Pagos a cuenta del IRPF

Retenciones del IRPF en las facturas del autónomo cuando el autónomo realiza facturas a empresas y otros profesionales.

En ellas, se aplica un 15% de IRPF del importe de la factura, y que quedará ingresado en Hacienda a nombre del autónomo y le aparecerá como un adelanto de la Declaración de la Renta. Los autónomos emprendedores, al iniciar actividad retienen un 7% en las facturas.

Liquidaciones a cuenta del IRPF. Se trata de una autoliquidación trimestral que se hace a través del modelo 130 para estimación directa o modelo 131, para los módulos.

Se realiza al finalizar cada trimestre, en función de los ingresos y gastos de ese periodo, para el caso de estimación directa, o en función de los variables preestablecidas por Hacienda en los módulos

Declaración de la Renta

Pago final por IRPF mediante la declaración de la renta. Este es el modelo donde se aplican los tramos que hemos visto, y donde se liquida el impuesto.

Saldrá una cantidad de IRPF a pagar, de los que habrá que descontar, las deducciones de las que pueda beneficiarse el autónomo como persona física, así como los distintos de pagos a cuenta realizados durante el ejercicio, teniendo un resultado final a pagar o a devolver de la renta.

Como autónomo el pago de impuestos parece infinito, pero los beneficios tributan solo en el IRPF, lo que pasa es que existen distintos mecanismos para la gestión del impuesto.

Fuente; pymesyautonomos.com