Alicante, 17-05-2021.
Quedan menos de 600.000 trabajadores en ERTE. La mayoría de ellos de sectores como turismo y hostelería que dependen de la posibilidad de viajar y salir con normalidad. Y la realidad indica que una vez que se recupera la movilidad el número de empleados en ERTE disminuye de forma exponencial. Porque son sectores que demandan un alto número de puestos de trabajo. Y lo harán más llegado el mes de junio, cuando al menos en parte se recupere la movilidad internacional. Porque decir recuperación de la movilidad, es decir adiós a los empleados en ERTE.
Y aquí no se avanza más rápido en la recuperación de empleados por varios motivos. El primero es que en muchos lugares saben que van a trabajar mucho y muy bien el fin de semana, pero puede que entre semana no tengan la misma afluencia de público. Sigue faltando en muchos sitios el turista de fuera de temporada.
La segunda es que al igual que hemos aprendido a convivir con el virus, muchos empresarios han aprendido a no ser demasiado optimistas. Mejor ser prudentes y sacar al mínimo personal imprescindible, que luego tener que volver a meterlos al cabo de dos semanas si se imponen nuevas restricciones debidas a un repunte. No sería la primera vez.
Además, esta segunda situación a veces tiene la nefasta consecuencia de que los empleados pueden sufrir retrasos en los pagos del SEPE, lo que al final supone un problema añadido. Por eso muchos prefieren ser prudentes y, con la esperanza moderada de un buen verano, muchos van recuperando gente, pero para la completa recuperación habrá que esperar.
Ahora para tratar de hacer una mínima previsión de cómo puede ir la campaña de verano toca tener en cuenta factores como:
- ¿Se van a producir repuntes en la cifra de contagios que obliguen a nuevas restricciones? Hasta ahora un aumento de la movilidad a supuesto de forma automática un aumento de la incidencia. Lo veremos dentro de 15 días y como se traslada esto a la presión hospitalaria.
- Si llegamos al inicio del verano con al menos una dosis de vacuna puesta al 70% de la población, ¿será una campaña sin restricciones a la actividad?
- ¿Se recuperará el turismo internacional? Aquí dependemos de diferentes factores, como la aprobación del pasaporte COVID, la situación de riesgo con la que nos cataloguen en los países emisores o cómo esté afectada la competencia de países receptores a nivel internacional.
- ¿Se prolongará la temporada de verano? Previsiblemente sí. La situación con el avance de la vacunaciónhace que la incidencia baje y con ello muchas de las personas que no hayan podido viajar y salir en verano puedan hacerlo en otoño. Y ganas desde luego como hemos visto no faltan.
A pesar de todo se van a extender la posibilidad de mantener los ERTES próximamente al menos hasta septiembre. Llegados a este punto esperemos que sea una excepción tener a algún trabajador en esta situación.
Fuente; pymesyautonomos.com